miércoles, 10 de febrero de 2016

EL ABRAZO DEL ALMA

 Aveces me pregunto : ¿Por qué me gusta tanto el fútbol? y creo que la única manera de encontrar esa respuesta es buscando en el corazón, y es donde busco y trato de encontrarle alguna lógica a este sentimiento y no puedo. Se me hace mas difícil de lo que creí, nunca pensé que no podría definir en simples palabras porque es que me gusta tanto, y éso es lo raro ¿Cómo puedo pasarme la vida hablando de un deporte, si ni siquiera puedo definir el por qué me gusta tanto?. Algo ilógico por donde se mire, pero la respuesta esta ahí, a simple vista, siempre ha estado ahí.
La verdad es otra, el fútbol en si, es solo un deporte mas, el mas común de todos, once tipos contra otros once que corren tras un balón. Ahora entiendo, lo que verdaderamente me apasiona es lo que me hace sentir el fútbol, algo que va mas allá de un partido de 90 minutos, donde por lo general se juegan 3 puntos, quizá algo más, quizá algo menos, pero no, no, no puede ser eso; lo que en verdad me apasiona es algo que no se puede percibir con los sentidos, es algo que solo se siente con el alma y es por eso, que al pensar en un titulo para este blog lo primero que se me vino a la mente fue eso "El Abrazo del Alma", cuatro palabras, una foto, tres personas, un momento histórico, una historia detrás de una fotografía, una imagen que capturo exactamente lo que me fue difícil describir a mi. 

Buenos Aires, Copa Mundial de la FIFA, Estadio Monumental de River, son las 5 y 30 minutos del  25 de Julio de 1978. Argentina de la mano de Mario Alberto Kempes acaba de coronarse campeona del mundo venciendo Holanda en un partido memorable, el cual merece un post especial. El estadio vibra, 71,483  personas en la platea gritan, cantan, se abrazan ¿cómo no? ¡Son Campeones del Mundo!, pero sólo hay una que corre y busca la manera de entrar a la cancha. Mientras tanto, en el campo, Alberto Tarantini no lo puede creer, ha tenido un año para el olvido, peleado con la dirigencia de Boca Juniors, el club en el cual se formó, a punto de ser echado del equipo, acaba de cumplir el sueño de su vida, el sueño de todo niño que alguna vez jugó al futbol, ganar un mundial, lo que es la vida y lo que es fútbol, las piernas le tiemblan, no puede más, a unos metros de el, Ubaldo Fillol,
"El pato" para los amigos, quien sería considerado uno de los mejores arqueros de la historia, yace arrodillado en el césped, se acuerda de sus padres, se ve a él mismo de niño, caminando hasta el estadio Centenario de Quilmes, rabiando porque sus amigos se han burlado de él: "Pibe, andá a chapar mariposas boludo", -"sere el mejor arquero del mundo"- pensaba en esa época, sin saber que años después lo lograría. Y ahora esta llorando, no puede mas, la eterna soledad del arquero de celebrar solamente con los tres parantes, pero esta ves no, Tarantinni lo ve y las piernas le siguen temblando, no puede mas. 




En la tribuna, Victor Dell'Aquila es el único que no se abraza como todos, corre hacia la cancha, perdió ambos brazos en un accidente cuando era niño, no importa el sigue corriendo, la gente lo ve correr y no lo entienden, no importa no va dejar de correr, todo el mundo cree que es imposible que entre a la cancha, no importa ellos no entienden, quizá porque a él como a mi, nos mueve el corazón y el fútbol lo sentirnos con el alma, él, aún sin tener extremidades no quiere abrazar al hincha del costado, quiere abrazar a esos dos leones que están en el campo, llorando como niños, apoyados uno sobre otro, han dejado su vida en más de 120 minutos, todo por él, por los que están en el estadio, por los que están en su casa, por todo su país, por todos los argentinos, quiere abrazarlos, no importa que no tenga brazos, eso es lo de menos. 

Tarantiini y Fillol se abrazan, están solos, pero es la soledad más hermosa que han pasado, no se dan cuenta aún de lo que lograron, sólo quieren llorar. Y de pronto, ocurre un milagro, Victor esta ahí, con ellos, abrazándolos, y ellos lo sienten, es el abrazo de todo su país, lo han logrado.
De ésto se trata el fútbol, de ésto es capaz el fútbol, de lograr milagros, de hacer que lo imposible se vuelva posible, de lograr que un hincha sin extremidades se envuelva en un abrazo eterno con sus héroes. Es así como yo siento este deporte y es por estas cosas es que me encanta. Es esa sensación inexplicable que solo la entenderás si sientes el fútbol como yo. Y es por éso que no encontraras razón para estas lineas, para este blog, no encontraras una razón mas allá de un simple sentimiento que te llena el alma, que te hace creer que lo imposible es posible.




"El Abrazo del Alma"-  foto de Ricardo Osvaldo Alfieri (Revista el Grafico Argentina) 

Y bueno, como dijo el Diego "Yo sólo fui feliz jugando a la pelota y los hice felices a ustedes", yo sólo soy feliz escribiendo de lo que me gusta, si les gusta, seré feliz también. 

Au revoir Shoshana.

- Andree Pesantes
      

4 comentarios:

  1. Buena, viejo! Tienes una pasión reconocida. Realmente es el sentimiento del alma... Indescriptible.

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  2. Gracias viejo, tenía esto en mente hace mucho y recién me anime. Para todos los que sentimos el futbol así.

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  3. Un abrazo mi flaco. Cumpliendo el sueño de chico. Dejando una huella que plasma la pasión por el deporte más hermoso del planeta.

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    1. Mi Chavez, mi arquerito de siempre, tu sabes mas que nadie, tu sientes el fútbol igual que yo. Gracias mi cholo.

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